¿Qué es mejor la tarima flotante o la tarima de madera?
Un suelo laminado cuya madera se ha desgastado con el tiempo es fácil de restaurar, mientras que un suelo lamin ado dañado requiere la colocación de un nuevo revestimiento. Para los suelos laminados se pueden encontrar materiales de imitación de madera, baldosas, piedra natural, etc. Una de las ventajas de este suelo es la inmensa posibilidad de diseños que ofrece, desde la imitación de parquet y mármol hasta la imitación de madera exótica sin dañar el ecosistema. Por último, es aconsejable aplicar algún tipo de plastificante para proteger la madera del desgaste, que además permite una fácil limpieza.
La autenticidad de la madera del parquet flotante es una de las características más apreciadas de este producto. Los suelos de parquet son de 100 y madera con un grosor que va de 10 mm a 1 cm, la longitud no va más allá de 45 cm mientras que la tarima tiene un grosor que va de 15 a 28 mm. Este parquet es una versión moderna de los suelos de madera maciza y es capaz de combinar la durabilidad y la calidad del producto. Además, es la opción más resistente a la humedad porque, mientras que la madera natural puede dañarse fácilmente con el agua, el suelo laminado tiene una capa superior que impide la penetración de la humedad.
El coste del material y la mano de obra para colocar una tarima flotante de madera natural es más elevado. Se colocan sobre un suelo nivelado y limpio, que puede ser de madera, aunque lo habitual es realizar la instalación sobre una base de hormigón. Si hablamos de la instalación del suelo, la tarima flotante es mucho más sencilla, ya que se coloca sobre un suelo base y sin necesidad de hacer obra. La instalación del parquet supone empezar a pensar en obras, ya que requiere la fijación de tablas de madera al suelo.
El parquet es un tipo de suelo formado por tablas de madera dura (normalmente roble, castaño, haya u olivo) de unos 45 cm de longitud. La importancia del suelo en una casa es considerable, por lo que las grandes elecciones como el parquet o el suelo laminado pueden resultar difíciles. Sin embargo, en el caso del suelo laminado depende demasiado del material con el que finalmente se fabrique, aunque si los cuidados son los idóneos, puede durar en el tiempo, pero es más sensible que el parqué. Es muy común confundir un suelo laminado con un suelo flotante, por su aspecto y características similares.